El Ayuntamiento y el comedor de las Desamparadas han firmado un nuevo convenio con el que se evita el cierre del lugar, según el departamento de Políticas Sociales, Personas Mayores e Infancia. De esta manera, el comedor social recibirá 368.020 euros para dar de comer y cenar a personas atendidas por los servicios sociales municipales que carezcan de recursos y accedan a esta prestación.
Según fuentes consultadas por esta redacción, la cantidad que se aporta con este nuevo convenio no salva al centro social de acabar el año déficit, pero sí garantiza su continuidad. En los últimos años, cuando se prorrogaron los presupuestos, no se firmaron nuevos convenios y su déficit se acercó a los 100.000 euros, “una situación insostenible”.
Con este nuevo convenio el ayuntamiento abonará cinco euros por cada comida y seis por cada cena. Este precio estará vigente durante todo el año 2020 con un total de 180 menús diarios – 90 comidas y 90 cenas – para las personas derivadas por los servicios sociales municipales, lo que supone 59.220 menús, teniendo en cuenta que el comedor no abre en agosto ni los últimos días de julio. De igual manera, incluye el pago de los menús de más servidos el año pasado a personas derivadas por el Ayuntamiento, lo que representó un gasto añadido de 42.308 €.
La aprobación de este convenio llega tras la dudas surgidas meses atrás sobre la continuidad del comedor por el anuncio de cierre realizado por sus responsables. Sin embargo, el acuerdo alcanzado entre la fundación encargada de su gestión y el Ayuntamiento aseguró su funcionamiento “lo que es una buena noticia porque complementa al comedor social municipal de Los Arquillos y nos asegura algo más de 59.000 menús para ayudar este año a cientos de personas en vulnerabilidad que necesitan cubrir una necesidad tan básica como es la alimentación”, ha asegurado Jon Armentia, concejal de Políticas Sociales, Personas Mayores e Infancia.
El comedor social de Desamparados recibirá del departamento de Políticas Sociales, Personas Mayores e Infancia a unidades convivenciales unipersonales y, excepcionalmente, a dos miembros de la misma familia, sin menores de edad a cargo que además de la problemática de carencia o insuficiencia de recursos económicos tienen otras problemáticas añadidas como la falta de habilidades para organizar su presupuesto o problemas en sus domicilios para elaborar la comida. Estas personas podrán comer y cenar en el comedor. En situaciones excepcionales, valoradas por las trabajadoras sociales, podrán recoger diariamente la comida elaborada en el comedor y llevársela a su domicilio.