«Esta es una nueva guerra se le impone a un pueblo cansado, frustrado y hastiado«
Diversas organizaciones vascas que trabajan en solidaridad con el pueblo saharaui han denunciado en un comunicado la ruptura, por parte de Marruecos, del alto el fuego en el Sahara Occidental vigente desde 1991 y han exigido al Gobierno español y a la comunidad internacional, representada en Naciones Unidas, que asuman su responsabilidad en el conflicto y organicen el referéndum de autodeterminación cuya celebración acordaron las partes en el Plan de Arreglo de 1988.
El movimiento solidario ha subrayado la responsabilidad del estado marroquí en la reanudación de las hostilidades, así como “de la inestabilidad que se ha generado y que se puede extender a toda la región del Magreb”, por haber violado el alto el fuego y los acuerdos militares que pusieron fin a la guerra en 1991 al desplazar tropas a la zona de Guerguerat, en territorio gobernado por la RASD, para reabrir el paso ilegal que civiles saharauis estaban bloqueando pacíficamente desde el 21 de octubre. “Tal y como Naciones Unidas recoge en el Acuerdo de Paz (1988) y los acuerdos militares entre Marruecos y el Frente Polisario se prohíbe la apertura de pasos en el muro militar marroquí”, han recordado en el comunicado.
Ante la ruptura del alto el fuego, las organizaciones han reclamado al Gobierno español “que asuma su responsabilidad respecto al último territorio no autónomo del continente africano, pendiente de descolonización”. Al mismo tiempo, han señalado a Naciones Unidas y su Misión para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO) “por su incapacidad de mantener la seguridad en la zona y no proteger a los y las ciudadanas saharauis que se manifestaban pacíficamente hasta el 13 de noviembre, así como su inacción a lo largo de los últimos 45 años”.
“Esta es una nueva guerra que se le impone a un pueblo cansado, frustrado y hastiado, que ha sufrido un sinfín de promesas incumplidas durante estos 45 años”, han declarado. “Lo acontecido estos días no es sino muestra de un compromiso no respetado y la indiferencia de la comunidad internacional ante las reiteradas vulneraciones del Reino de Marruecos a los Acuerdos y el Derecho Internacional. Marruecos y sus valedores han confundido el compromiso del pueblo saharaui con las vías de solución pacíficas con debilidad”, han añadido.
