La primera edición del Premio Mujer Alavesa 2025 ha tenido como gran protagonista a Pilar Corcuera, reconocida por su trayectoria en el ámbito cultural, educativo y social. Su nombre no se conoció hasta el momento final de la gala celebrada este jueves en el museo Artium de Vitoria-Gasteiz, en un acto lleno de emoción y sorpresa.
Este galardón nace de una iniciativa de Onda Cero Vitoria que invitó a sus oyentes a proponer a mujeres referentes del territorio. Amigos, familiares, compañeros, alumnas y personas cercanas enviaron sus candidaturas, configurando una lista diversa de perfiles que destacan en diferentes ámbitos. A partir de esas propuestas, un jurado compuesto por profesionales de distintas entidades fue el encargado de elegir, de forma independiente, a la mujer reconocida este año.
Ninguna de las candidatas sabía con certeza quién recibiría el galardón. Tampoco lo sabía Pilar Corcuera, que se enteró de su elección en directo, durante la lectura del fallo, visiblemente emocionada.
Una vida vinculada a la palabra y a la comunidad
Pilar Corcuera ha dedicado buena parte de su vida a acercar la literatura a distintos colectivos. Ha trabajado con niñas y niños, adolescentes, personas mayores y mujeres en contextos vulnerables, a través de talleres de escritura, recitales y actividades intergeneracionales. “Podéis tener la certeza de que cada día en este trabajo diario recibo mucho más de lo que doy”, expresó en su intervención.
Agradeció especialmente al grupo literario Idazki, compuesto por alumnado suyo, por haber promovido su candidatura sin decírselo: “Lo han hecho a la chita callando para que yo no me enterara”. Para ella, ese gesto ya era un premio.
Corcuera ha recordado también sus inicios en la literatura, cuando participó en un taller de escritura en su barrio. Más adelante decidió estudiar Filología Hispánica y empezó a dar clases en programas municipales y centros culturales. “Estoy jubilada, pero tengo una jubilación activa”, bromeó.

Poesía, escena y compromiso social
Uno de los proyectos que la definen es “Ataviadas para el verso”, donde combina poesía y puesta en escena para dar vida a autoras como Emily Dickinson o Emily Brontë. Además, forma parte del grupo literario Iraci y es autora del poemario Las edades del agua, inspirado en su infancia en Miranda de Ebro, junto al río Ebro.
También ha coordinado talleres de escritura con mujeres internas en centros penitenciarios, ha colaborado en recitales con enfoque social y ha participado como jurado en certámenes literarios. “Desde lugares y espacios diferentes estamos haciendo camino, una trayectoria que está dejando huella”, dijo.
Una donación solidaria a Médicos Sin Fronteras
Como parte del reconocimiento, la galardonada pudo escoger una organización social a la que destinar una donación solidaria. Pilar Corcuera eligió Médicos Sin Fronteras: “Porque están siempre en primera línea, exponiéndose en todos los conflictos bélicos, en accidentes naturales… siempre los veo ahí, luchando”.
Desde la organización agradecieron el gesto y subrayaron la conexión entre la trayectoria de Pilar y el valor de la palabra: “No tenemos la seguridad de que la palabra siempre salve vidas, pero sí sabemos con certeza que el silencio mata”.
Un premio colectivo
Aunque Pilar Corcuera fue la galardonada, la gala también sirvió para homenajear al conjunto de mujeres propuestas por la ciudadanía. Entre ellas figuraban artistas, docentes, empresarias, activistas, profesionales de la salud y del deporte. Todas fueron presentadas con pequeñas semblanzas que permitieron conocer su recorrido vital.





