Las once residencias que forman parte de la red foral se encuentran libres de COVID19, según ha informado Ramiro González, DIputado General de Álava. En sus palabras, esta situación es “un motivo de alegría” señalando que únicamente 11 personas residentes en centros privados continúan siendo positivas por coronavirus. También ha resaltado que, a día de hoy, ninguna trabajadora ni trabajador de las residencias forales es positiva por coronavirus, una situación que no ocurría desde el 24 de marzo.
Los encuentros entre familiares y residentes ya se permiten con especiales medidas de seguridad e higiene, ya que “la prioridad es preservar la salud de personas usuarias, familiares y personal trabajador, y evitar nuevos contagios”.
El diputado general ha resaltado que esta reapertura tiene un carácter “especial, porque lo primordial es la seguridad, y por eso hay un protocolo a seguir”. En esta nueva fase, se van a seguir tomando medidas de seguridad para garantizar que las personas mayores puedan recibir “el cariño y el contacto presencial” de sus familiares.
Asimismo, ha transmitido un “triple” agradecimiento. En primer lugar, a las personas usuarias y a sus familiares que, a pesar de las comunicaciones “virtuales” que han establecido las residencias, no han podido mantener un contacto directo, lo que “ha tenido que ser durísimo”, ha reconocido.
La Residencia Lakua, con 50 plazas para personas usuarias con gran dependencia y dependencia severa, ha superado la pandemia con solo dos casos positivos entre sus residentes, que ya están recuperados, y sin tener que lamentar fallecimientos por causa del virus. En este centro, se van a realizar alrededor de una veintena de encuentros familiares diarios, divididos en grupos de cinco para garantizar las distancias entre personas.
Visitas presenciales
Las visitas se van a llevar a cabo de forma progresiva hasta llegar a la normalización, en función de la evolución de la situación de la COVID-19 en los centros y en la comunidad, por lo que puede haber alguna diferencia de un centro a otro, pero siempre siguiendo las recomendaciones de las instituciones sanitarias.
Los encuentros van a ser siempre con cita previa, de una persona por residente, preferentemente con el mismo familiar pero podría alternarse con otro, y un tiempo máximo de 1 hora diaria. En el caso de que la persona residente se encuentre en aislamiento por ser COVID-19 positiva o por prevención, la duración del encuentro es de 20 minutos máximo, y extremando las medidas de protección y seguridad.