Internet se ha convertido en algo vital en nuestras vidas a la hora hacer compras o conseguir información sobre un producto. Nos hemos acostumbrado a ver como grandes empresas han conseguido crecer aún más gracias a la red al haberlo convertido en un escaparate al que todo el mundo puede acceder.
En los últimos meses, se habla mucho de la digitalización a todos los niveles. Incluso del pequeño comercio. Este último grupo, posiblemente, sea el que más difícil lo puede llegar a tener, sobre todo si son relacionados con la alimentación o productos perecederos.
Ante esta situación, según ha sabido GasteizBerri, el Ayuntamiento tiene un plan sobre la mesa para poder ayudar a los y las vendedoras del mercado de Santa Bárbara a engancharse a la red y poder aumentar sus ventas. Se trata de crear un apartado propio de la feria en la web de la ciudad, donde existirá la posibilidad de contactar con los vendedores para realizar encargos para su posterior recogida en el mercado. También se pretende incluir una lista de comerciantes que acuden, información sobre sus productos y contacto directo.
El propósito que tiene el área de comercio es «ayudarles en todo lo que esté en nuestra mano» para dar «mayor visibilidad a este Mercado, en la web municipal y en la misma plaza» con el objetivo de que aumente el público que acude. Por el momento no hay una fecha exacta para el lanzamiento de este apartado, pero nos han señalado que «es un plan en el que se está trabajando duro para poder sacar adelante» para «conseguir que el mercado sea más conocido».
El tradicional Mercado de Santa Bárbara se celebra todos los jueves y sábados en pleno centro de Vitoria-Gasteiz, en la plaza homónima al mercado. Allí se reúnen más de 30 productores y vendedores para ofrecer a la clientela sus mejores elaboraciones: pan, frutas, verduras, legumbres, miel, queso, repostería, aceite y vino, entre otros productos de primera calidad.
Según la norma, puede haber hasta 16 puestos de productos hortofrutícolas, 3 de vinos y licores, 1 de miel, 1 de aceite o huevos, 6 de pan, 6 de queso y 2 de embutidos. Queda expresamente prohibida la reventa de productos y únicamente pueden participar en dicho mercado las empresas cuya elaboración sea artesanal y cuya plantilla sea inferior a 10 trabajadores/as. Es decir, los conocidos como «negocios familiares».