¿Se puede prohibir utilizar el aseo de un bar?

¿Aguantaré hasta llegar a casa?

PUBLICADO EL

Comparte esta noticia

OPINIÓN | A quien no le ha ocurrido alguna vez al ir caminando por la calle y tener que ir al aseo y nunca sabemos muy bien cómo actuar. Los baños públicos no abundan en las grandes ciudades, así que el recurso de acceder a un centro comercial o a establecimientos de hostelería suele ser lo que está más a mano. Sin embargo, en la hostelería muchos han puesto un «cartelito» que limita su uso exclusivamente a sus clientes, pero esa prohibición no está regulada de ninguna manera, por tanto, no tiene ninguna legalidad.

El otro día vi el video de un abogado para resolver esta duda, quien planteó este tema en su canal para que tengamos una base a la hora de usar los baños sin tener que consumir previamente. ¿Se puede prohibir utilizar el aseo de un bar? ¿Qué hacemos?

La respuesta que da este abogado es que no te pueden prohibir el acceso al baño, profundizando en que «no hay ninguna normativa ni estatal ni autonómica que lo prohíba», y la única manera que tendría el dueño de un bar o un restaurante para prohibirle el acceso al baño sería que se amparara en el derecho de admisión. Pero según las diferentes organizaciones de consumidores, entienden que utilizar el derecho de admisión para impedir el acceso al baño sería una acción totalmente arbitraria, injusta y denunciable.

Es por ello que el derecho de los usuarios al acceso y a la utilización de los servicios solo estará sometido a las limitaciones que tenga establecidas la empresa en el ejercicio del derecho de admisión. La prohibición de utilización del aseo por parte de personas que no sean clientes podría ser objeto de infracción grave por parte del titular del establecimiento, ya que se podría considerar arbitraria, discriminatoria o abusiva la conducta del titular en el ejercicio del derecho de admisión.

El hecho de estar en una urgencia, con la vejiga a punto de estallar, y dirigirse a un bar solo para usar el servicio. Y cuántas veces han tenido que sacar la cartera para consumir, aunque ni te apetezca ni lo necesites, una cervecita, una botella de agua, un café. Qué rabia si lo único que quiero es usar el puñetero baño. Lo sabemos, ir al aseo de un bar sin consumir es prácticamente misión imposible, a no ser que demos con el propietario más benevolente, que por cierto, son muchos.

Pero cuidado, siempre te puede tocar la «oveja negra». Hace casi dos años, el dueño de un bar en Valencia apuñaló a un hombre durante una pelea por ir al baño sin pagar nada.

La única normativa que se pronuncia al respecto es la de Castilla y León de 2016, que zanja el asunto de la siguiente manera al afirmar que los clientes de los servicios de restauración están obligados a: «No alterar la convivencia y las normas internas de acceso y permanencia»; «No consumir otras comidas o bebidas que las que se sirvan en los establecimientos»; «No utilizar los aseos u otras instalaciones de los establecimientos de restauración por personas que no sean clientes»; «Abonar el precio correspondiente a los servicios prestados».

Por tanto, si quieres utilizar el aseo de un bar y no pagar consumición, ya puedes ponerle buena cara al propietario, porque te lo puede impedir.

El peculiar caso aragonés. En España se han vivido situaciones excepcionales con respecto a esta legalidad. En 2011, el Ayuntamiento de Zaragoza firmó un acuerdo con la Asociación que engloba a Cafés y Bares por el que los establecimientos permitían el uso gratuito de los aseos a los ciudadanos. Una especie de convenio por el que los establecimientos de esta entidad que lo deseen se incorporarán a la red municipal de aseos públicos sin pagar nada, ni consumir, poniendo sus aseos a disposición de toda la ciudad.

En ese momento, el ayuntamiento proporcionó a los establecimientos un distintivo homologado para poner en sus locales e incluso estudió una posible reducción de la tarifa del agua en los impuestos, que sería proporcional al incremento del consumo que se haya producido por el uso de los servicios de cada local.

«Averiado». El cartel, cada vez más frecuente en las puertas de los baños de los bares, da lugar a ciertas dudas. Sobre todo, en época de vacaciones, festivos o eventos tanto deportivos como culturales, cuando las aglomeraciones de gente hacen que se formen largas colas a las puertas de los aseos. Los locales hosteleros, por ley, tienen la obligación de mantener abiertos, y en buenas condiciones higiénicas, los servicios. Sin embargo, no siempre es así.

Una cosa es que no tengan papel; otra es que los tengan cerrados. Con esto no solo perjudican a quienes no son clientes, sino también al cliente, aunque este último tendría más facilidades al no volver a ese local.

¿Y quién toma medidas? Nadie. Si la Policía Municipal recibe una queja por el cierre del aseo de un bar, traslada el expediente al Departamento de Urbanismo, que normalmente suele ser el responsable de la ordenanza municipal. Pero esta área pasa la pelota a Salud y Consumo, quienes deberían regularlo. Y estos últimos, del mismo modo, niegan todo. Unos por otros, la casa sin barrer. En los últimos años, a pesar de haber quejas, no se ha sancionado a ningún hostelero por este motivo. En definitiva, los bares tienen inmunidad para cerrar el baño.

Aquí, sobre todo en el centro donde antes había uno al comienzo de la calle Olaguibel, detrás de Correos, con la reforma que han hecho del entorno, los han quitado y hay que recordar que muchos ciudadanos y ciudadanas con diferentes patologías pueden necesitar tener un baño cerca. ¿Vamos a obligarles a que cada vez que lo necesiten tengan que consumir algo? Y si no los dejamos, ¿los encerramos en casa o permitimos que la calle se convierta en un aseo?

Eso sí, no seamos tan «guarros». Cuando usemos un aseo, sea de donde sea, por favor, tiremos de la cadena y tratemos el lugar mejor aún que si fuera el de nuestras propias casas.

*/GasteizBerri.com no se hace responsable de las opiniones vertidas por sus colaboradores.


LAS NOTICIAS EN TU MÓVIL

¿Quieres recibir las noticias de GasteizBerri en tu teléfono móvil?



- -

TU COMENTARIO SE PUBLICARÁ UNA VEZ SEA APROBADO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

PUBLICIDADspot_img
PUBLICIDADspot_img
PUBLICIDADspot_img
PUBLICIDADspot_img

ÚLTIMAS PUBLICACIONES

La Síndica denuncia que empadronarse sin domicilio fijo sigue siendo una barrera para muchas personas

La memoria anual recoge quejas por la negativa a empadronar a personas sin domicilio fijo y la falta de atención adecuada

NOTICIAS RELACIONADAS

Opinión | El transporte público necesita más mujeres… ¿Pero en qué condiciones?

Empresas de autobús y servicios ferroviarios, englobadas en la Asociación de Transportes Públicos Urbanos...

Viudas en la sombra: una desigualdad ignorada

En España, el sistema público de pensiones es una de las conquistas sociales más...

El precio de las bolsas: entre la ecología y la publicidad encubierta

Desde el 1 de enero de 2021, la normativa española prohíbe la entrega gratuita...

Partidos en Álava, Javier Hurtado y la falta de democracia interna

.opinion-author-block { font-family: 'Georgia', serif; text-align:...

TUVISA: 15 años de olvido

Señoras y Señores políticos, sigan así y llegará el día en el que los ciudadanos y ciudadanas, no nos creamos ni las verdades.

¿Quién paga el precio de las Zonas de Bajas Emisiones en nuestra ciudad?

¿Si no se puede circular por media ciudad, me van a cobrar la mitad del impuesto de circulación?