Se acerca la campaña electoral y, como diría un popular cocinero-presentador, 'alucino pepinillos'. Las promesas parecen encantarnos, pero un engaño masivo ha reemplazado a un programa político riguroso. ¿Su objetivo? Quizás simplemente engañar a la ciudadanía.
“La vida no es fácil para nadie. Pero ¡qué importa! Hay que perseverar y, sobre todo, tener confianza en uno mismo. Hay que sentirse dotado para realizar alguna cosa, y esa cosa hay que alcanzarla, cueste lo que cueste.”
“A veces no somos responsables de lo que nos pasa en nuestras vidas, pero siempre, absolutamente siempre, lo somos de cómo afrontamos lo que nos pasa. Esa libertad última, la de elegir como respondemos frente a las circunstancias, nadie nos la puede arrebatar”.
El Ayuntamiento de Gasteiz, encabezado por el alcalde, el concejal de movilidad y el consejo, que permiten la nefasta gestión del transporte urbano que afecta a los derechos laborales, de salud y de seguridad de la plantilla, pone en riesgo la seguridad tanto de las personas usuarias como de la ciudadanía en general.
“Administra mal quien gasta ciegamente los ingresos, sin poder distinguir luego, en los apuros, qué parte de los ingresos puede soportar el gasto y qué otra parte hay que librar de él.”