
Este lunes, el grupo municipal de Euskal Herria Bildu ha presentado una serie de preguntas y demandas relacionadas con el uso de viviendas municipales vacías en la ciudad. Su intervención se ha centrado en el caso del edificio situado en el número 10 de la calle Cubo, un inmueble de propiedad mayoritaria del consistorio, en el que se han llevado a cabo obras de rehabilitación que finalizaron el pasado mes de julio, con una inversión total de 98.000 euros.
La historia de este edificio comenzó en 2009, cuando un informe municipal alertó de la necesidad de llevar a cabo mejoras en su estructura, fachada, y en las instalaciones de electricidad y agua. Sin embargo, debido a la falta de actuaciones, en 2012 se ordenó el desalojo urgente de los vecinos por riesgo para su seguridad. Esta situación llevó al ayuntamiento a tomar la decisión de rehabilitar el edificio para asegurar su estabilidad y habitabilidad. No obstante, no fue hasta 2019, diez años después de aquel primer informe, cuando se concedió la licencia de obra para iniciar la reforma, que finalmente se concluyó en julio de este año, marcando un total de 15 años de espera.
EH Bildu ha subrayado que, a pesar de haberse completado las obras, las cinco viviendas municipales en el edificio permanecen vacías y sin el equipamiento necesario para ser habitadas. Ante esta situación, la agrupación reclamó al Ayuntamiento la necesidad de poner en marcha un plan de vivienda que permita la gestión adecuada de los inmuebles de titularidad pública y su destino a alquiler protegido. Además, EH Bildu ha recordado que Vitoria-Gasteiz es la única capital vasca que no cuenta con un plan de vivienda, situación que consideran inadmisible dados los altos niveles de demanda de alquiler asequible en la ciudad.
La rehabilitación del edificio en la calle Cubo ha requerido una inversión de 98.000 euros, de los cuales el Ayuntamiento ha asumido la mayor parte. La inversión responde a un proyecto de rehabilitación integral que incluyó la reparación de la estructura, la fachada y la instalación de nuevas redes de luz y agua. Sin embargo, aunque el edificio se encuentra ahora en condiciones seguras, las viviendas siguen sin uso debido a la falta de equipamiento y acondicionamiento necesario.
Respuesta del Ayuntamiento
En su respuesta, el concejal de Urbanismo, Borja Rodríguez, ha explicado que el Ayuntamiento posee el 67,74 % de la propiedad del edificio en la calle Cubo, lo que corresponde a cinco de las ocho viviendas totales, además de un sótano. También ha reconocido que, aunque las obras han asegurado la estructura y habitabilidad del inmueble, las viviendas municipales aún necesitan ser acondicionadas para su uso habitacional. También ha precisado que, hasta la fecha, el coste de las certificaciones de obra ha sido asumido íntegramente por el consistorio debido a la falta de aportaciones de los copropietarios privados, quienes dejaron de contribuir al fondo de la comunidad, a pesar de los numerosos requerimientos realizados para el cobro de las cuotas.
Rodríguez ha destacado que el Ayuntamiento, junto a Ensanche 21 y el Departamento de Políticas Sociales, ha trabajado en un plan de acción para adecuar gradualmente las viviendas municipales vacías, con el objetivo de destinarlas a personas en situación de vulnerabilidad. Sin embargo, ha apuntado que, aunque hasta ahora se ha priorizado esta línea de trabajo, el consistorio está abierto a explorar “otras vías” que permitan optimizar el uso de sus propiedades en desuso y ampliar las alternativas de vivienda para los ciudadanos de Vitoria-Gasteiz.
EH Bildu ha insistido en que, ante la cifra de 13.617 demandantes de vivienda en alquiler protegido, el Ayuntamiento debe destinar sus recursos para atender la creciente necesidad de alojamiento asequible en la ciudad. Su portavoz en la comisión ha argumentado que la falta de un plan de vivienda ha contribuido a que la mayoría de las viviendas municipales continúen vacías, incluso después de inversiones significativas como las realizadas en el edificio de la calle Cubo.