
El Ayuntamiento de Vitoria ha decidido limitar el número de participantes en las comparsas de Carnaval a 7.100 personas. Esta medida se ha tomado por motivos de seguridad, según la policía municipal, ya que el desfile del año pasado resultó demasiado largo y se prevé un incremento en el número de comparsas para este año. El año pasado se registraron 7.076 participantes, y el año récord, antes de la pandemia, fue de 7.162 personas.
La previsión del Ayuntamiento era que este año se superaría ampliamente esa cifra, lo que llevó a barajar varios escenarios para mantener el control, incluyendo la posibilidad de dividir las comparsas entre el sábado y el domingo o limitar el número de comparsas a 25. Sin embargo, finalmente se ha optado por establecer un límite total de 7.100 personas para todo el desfile.
Aunque aún no se sabe el número exacto de comparsas que participarán, si se repitieran las 25 comparsas del año pasado, el número de integrantes por cada una estaría limitado a 284 personas. Sin embargo, el Ayuntamiento da por hecho que el número de comparsas aumentará, lo que podría modificar el límite de personas por grupo.
Actualmente, las comparsas están a la espera de que se abra el plazo de inscripción, cuya convocatoria se prevé aprobar el próximo 31 de octubre. Algunas comparsas ya han abierto las inscripciones, y otras lo harán en los próximos días, lo que ha generado incertidumbre entre las entidades participantes debido a los límites de participación aún no definitivos.
El borrador de la convocatoria establece que cada comparsa deberá tener un mínimo de 80 personas y un máximo de 400. Además, se permitirá el trasvase de participantes entre comparsas bajo acuerdo firmado, en caso de que alguna entidad no alcance el número mínimo o supere el máximo permitido. Esto facilitaría que los participantes de las comparsas más grandes puedan incorporarse a otras más pequeñas.
La decisión se ha tomado tras varias reuniones con las comparsas desde enero. Según fuentes del área de Cultura, se exploraron tres opciones para garantizar la seguridad del evento. Finalmente, esta limitación ha sido la que más ha convencido a las entidades organizadoras, aunque aún no es oficial, ya que no ha sido aprobada por la junta de gobierno. «Nos avisaron desde la policía de que esto podía generar un problema de seguridad», explican desde el Ayuntamiento, aludiendo a la necesidad de no dividir la ciudad durante tantas horas.