Los vecinos y vecinas del Casco Viejo llevan cinco años esperando el prometido nuevo centro de salud en el antiguo hospicio de la calle San Vicente de Paúl. Rocio Vitero, de EH Bildu, y Garbiñe Ruiz, de Elkarrekin, han cuestionado duramente al concejal de Hacienda, Jon Armentia, en la última Comisión de Hacienda del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, por la falta de avances en el proceso de cesión del inmueble al Gobierno Vasco, un paso fundamental para iniciar la creación del nuevo centro sanitario.
Armentia afirma que la cesión se realizará cuando el edificio quede libre, pero las voces críticas denuncian una larga historia de promesas y falta de acción política para resolver una situación que afecta a cerca de 20.000 personas.
Claves de la noticia:
- En 2019, todos los grupos municipales apoyaron la cesión del antiguo hospicio para un nuevo centro de salud en el Casco Viejo.
- Las instalaciones actuales, que atienden a unas 20.000 personas, presentan problemas de saturación, deterioro y accesibilidad.
- Representantes de EH Bildu y Elkarrekin acusan al Ayuntamiento y al Gobierno Vasco de una falta de voluntad política para resolver el problema.
- El concejal de Hacienda afirma que la cesión del inmueble se producirá cuando el espacio esté libre, pero aún no se ha avanzado en ese sentido.
En la Comisión de Hacienda en el Ayuntamiento de este miércoles, representantes de EH Bildu y Elkarrekin han exigido respuestas sobre el retraso en la cesión del antiguo hospicio, que permitiría construir un centro de salud en el Casco Viejo. Rocío Vitero, de EH Bildu, ha planteado una serie de preguntas a Jon Armentia, concejal de Hacienda, cuestionando la falta de avances en un proyecto que se aprobó en 2019 con el apoyo de todos los grupos municipales. Desde entonces, asegura Vitero, los vecinos y vecinas del Casco Viejo y las inmediaciones esperan una solución que no llega, mientras el centro de salud actual continúa saturado.
Una promesa de 2019 aún sin cumplir
Vitero ha recordado que la propuesta para ceder el inmueble al Gobierno Vasco se aprobó hace cinco años y que contó con el respaldo unánime del pleno municipal. «Desde 2019, la ciudadanía del Casco Viejo espera un centro de salud digno. Nos encontramos ante un proyecto que no avanza, aunque han tenido recursos y acuerdo político para materializarlo», afirma Vitero, que además subraya el apoyo social a esta iniciativa.
La portavoz de EH Bildu ha explicado que, pese a la urgencia, la situación no ha mejorado, incluso con la asignación de dos millones de euros en los presupuestos del Gobierno Vasco en 2022 para la construcción del centro de salud. Según Vitero, el actual ambulatorio presenta graves carencias en ventilación, espacio y accesibilidad, y denuncia que muchas personas mayores y con movilidad reducida no reciben una atención adecuada en las instalaciones actuales. “Los vecinos y vecinas de Aldesarra merecen un centro de salud que responda a sus necesidades”, insistia.
Críticas de Elkarrekin y la respuesta del Ayuntamiento
Por su parte, Garbiñe Ruiz, de Elkarrekin, también ha expresado su preocupación ante la falta de avances en el proceso de cesión. “Esta promesa se ha repetido en varias campañas electorales, pero la realidad es que no se ha hecho nada”, afirma Ruiz, quien además ha indicado que cada año aparecen partidas presupuestarias para este proyecto sin que se materialice ningún cambio. «La ciudadanía necesita respuestas claras y una solución inmediata», remarca la representante de Elkarrekin.
Jon Armentia, el concejal de Hacienda, ha respondido a las críticas explicando que el edificio aún alberga el Servicio de Atención Diurna del Centro Integral de Atención a Mayores, lo cual impide su cesión al Gobierno Vasco en estos momentos. Armentia ha indicado que la cesión se llevará a cabo una vez que el edificio quede libre de las actuales actividades de atención diurna, pero reconoce que todavía no hay un plan de traslado en marcha para esos servicios. “La cesión se producirá cuando el servicio de atención diurna se traslade a otras dependencias, algo que aún no ha sucedido”, explica Armentia, añadiendo que el proceso de conversaciones y negociaciones con el Gobierno Vasco sigue en curso.
Armentia también ha hecho un llamamiento a la prudencia, indicando que un proyecto de esta envergadura requiere tiempo y coordinación entre instituciones. Además, niega que exista una falta de calidad asistencial en el actual centro de salud del Casco Viejo, y subraya que los servicios sanitarios en la zona continúan siendo “completos y satisfactorios”.
EH Bildu y Elkarrekin acusan al Ayuntamiento y al Gobierno Vasco de falta de compromiso
Tanto Vitero como Ruiz han manifestado su frustración ante lo que consideran una “falta de voluntad política” y acusan a las instituciones de “marear la perdiz” y trasladar constantemente la responsabilidad a otros departamentos. Según Vitero, en 2023 se anunció públicamente que la firma del convenio de cesión estaba a “semanas” de concretarse, sin embargo, al preguntar nuevamente en marzo de 2024, el Ayuntamiento respondió que no existía ningún expediente, documento o informe relacionado con el tema. Ruiz ha insistido en que «ni el Ayuntamiento ni el Gobierno Vasco han dado un solo paso concreto en estos cinco años».
El coste de los retrasos en la atención sanitaria
Además de la demora en la cesión del edificio, Ruiz ha destacado los costes asociados al mantenimiento del antiguo hospicio, un inmueble que ya ha comenzado a presentar desperfectos en la fachada. «Este es un edificio que podría haber sido rehabilitado por el Gobierno Vasco si ya se hubiera cedido, en lugar de suponer un gasto adicional para el Ayuntamiento», ha denunciado la representante de Elkarrekin.
Las críticas de la oposición también se enfocaron en la falta de coordinación entre el Ayuntamiento y el Gobierno Vasco, que, según ellos, han convertido la cesión del antiguo hospicio en un “recurso electoral” y una “promesa recurrente” sin intención real de cumplir. Ruiz concluye que “las vecinas y vecinos del Casco Viejo llevan demasiado tiempo esperando una solución que les garantice una atención sanitaria de calidad, y es urgente que esta promesa se haga realidad”.