Según ha informado el diario El Correo, el cuerpo sin vida de Larbi, un vecino de Vitoria de 57 años, fue encontrado el pasado miércoles por el dueño de un campo en la zona de Gamarra Menor, cerca de Durana. La Ertzaintza investiga el caso como una “muerte violenta”, aunque descarta de momento que se trate de un asesinato o un homicidio.
Un hallazgo que apunta a una descarga eléctrica
El cuerpo estaba cerca de una torre de alta tensión y presentaba signos claros de electrocución. Según El Correo, las primeras hipótesis indican que Larbi pudo haberse subido a la estructura, aunque todavía no se sabe por qué, y recibió una descarga fatal.
El lugar donde se encontró el cadáver es un descampado sin vallas ni casas cercanas. Los agentes no hallaron huellas ni señales de que hubiera otras personas involucradas en el lugar.
Dos semanas sin que nadie notara su ausencia
El dueño del terreno descubrió el cadáver al visitar su campo, algo que no hacía desde hacía al menos 15 días. Los investigadores creen que la muerte ocurrió hace unas dos semanas. Pese al tiempo transcurrido, nadie había avisado a la Policía sobre su desaparición.
Según el periódico, Larbi llevaba más de una década viviendo en Vitoria tras haber residido en Murcia, donde tuvo problemas económicos. Aunque había formado una familia y matriculado a su hijo en un colegio local, no figuraba en ningún registro oficial de desaparecidos.
El cadáver fue trasladado al Palacio de Justicia, donde se le practicó una autopsia. Los resultados podrían ayudar a aclarar las causas de la muerte, que están siendo investigadas por el Juzgado de Instrucción número 2 de Vitoria.