La síndica de Vitoria-Gasteiz, Leire Zugazua, ha pasado por los micrófonos del podcast de GasteizBerri para repasar los principales problemas que afectan a la ciudadanía en su relación con el Ayuntamiento. Desde su oficina, ha recibido cientos de quejas y consultas relacionadas con la gestión municipal, y muchas de ellas tienen un punto en común. La falta de respuesta, las trabas administrativas y la sensación de desconfianza institucional
El padrón se ha convertido en una barrera para quienes más lo necesitan
Durante la entrevista, Zugazua ha explicado que el padrón no es un simple trámite, sino un derecho esencial. Ha recordado que sin padrón no se puede acceder a ayudas sociales, escolarización o servicios básicos, y que esto afecta especialmente a personas vulnerables
Ha señalado que su oficina ha atendido numerosos casos de personas que residen de forma habitual en una vivienda, pero no han conseguido empadronarse. «Incluso en una lonja, una autocaravana o una infravivienda, si se vive allí, debe poder empadronarse. La ley lo permite»
También ha remarcado que el problema no está en la norma sino en su aplicación. Ha dicho que «se están aplicando criterios internos no publicados que impiden a mucha gente ejercer su derecho»
Falta de información, registros que no registran y trámites invisibles
Zugazua ha denunciado que el procedimiento para solicitar el padrón social en Vitoria no está publicado ni explicado en la web municipal. «En Bilbao se puede consultar fácilmente. Aquí no existe ese trámite visible para el ciudadano»
Ha compartido un caso reciente en el que una persona intentó presentar una solicitud y le fue rechazada en una oficina municipal. «Le dijeron que no podía entregarlo allí, que tenía que ir a Servicios Sociales. Eso no es cierto. Por ley se puede registrar cualquier escrito en cualquier oficina»
Además, ha explicado que el área de padrón no cuenta con asesoramiento jurídico específico. «Se están tomando decisiones importantes sin respaldo legal. Eso pone en riesgo los derechos de las personas afectadas».
La ciudadanía se siente tratada como sospechosa
Uno de los aspectos más preocupantes que ha destacado es la actitud con la que a veces se trata a los ciudadanos. «Se parte de la desconfianza. Como si la persona viniera a engañar. Y eso genera mucho malestar»
Ha defendido la necesidad de cambiar la cultura institucional. «La administración está para servir. Y hay que escuchar antes de juzgar. El problema muchas veces no es el contenido del trámite, sino la forma en que se atiende»
La administración no responde y eso genera desprotección
Zugazua ha advertido de que muchas solicitudes y quejas no reciben respuesta. Ha calificado esta práctica como «un mal endémico» de la administración municipal. «Hay ciudadanos que presentan una queja o una sugerencia y nunca reciben contestación. Y por ley, la administración está obligada a responder«
Por eso, ha insistido en la importancia de dejar constancia escrita de todas las gestiones. «Recomendamos siempre presentar las solicitudes por escrito y con registro. Es la única forma de garantizar que haya seguimiento y posibilidad de recurso»
El recargo del IBI ha desatado una avalancha de consultas
La síndica ha explicado que el recargo del 50% del IBI a viviendas vacías ha sido uno de los asuntos más conflictivos de los últimos meses. Según ha dicho, «la ordenanza dice que si a uno de enero no hay nadie empadronado, la vivienda puede considerarse vacía. Pero hay muchos casos en los que sí se vive, aunque no haya empadronamiento»
Ha enumerado situaciones como las segundas residencias, familiares que no figuran en el padrón o personas desplazadas temporalmente. «La casuística es muy variada. No se puede aplicar la norma de forma rígida»
También ha recordado que la propia ordenanza permite utilizar otros medios para demostrar la residencia. «El padrón constituye una presunción, pero no es la única prueba válida. Se deben aceptar otras evidencias si están justificadas»
Multas y embargos por errores en la notificación
La entrevista también ha abordado el problema de las sanciones que se notifican de forma incorrecta. Zugazua ha afirmado que «hay personas que se enteran de que tienen una multa cuando ya ha sido embargada. Nunca les llegó la notificación inicial»
Ha explicado que si una notificación no se realiza correctamente, no puede tener efecto legal. «Si el cartero marca como domicilio desconocido o no deja aviso, no puede considerarse notificado. Aun así, se publica en el boletín oficial como si lo estuviera»
El ruido y la convivencia generan conflictos sin una solución clara
Zugazua ha explicado que las quejas por ruido han aumentado en los últimos años, especialmente tras la pandemia. «Ya no se trata solo de bares. También hay molestias por charangas, transporte público, instalaciones técnicas o juegos en la calle»
Ha detallado que cuando el ruido proviene de una actividad regulada, sí se pueden tomar medidas. «En esos casos se hacen mediciones, se puede requerir una obra o instalar un limitador. Pero cuando se trata de uso informal del espacio público, es mucho más difícil intervenir»
Ha contado que desde la oficina han hecho propuestas concretas como colocar mobiliario para disuadir el juego en ciertas fachadas. «En ocasiones no se aceptan por criterios técnicos, pero son intentos de mejorar la convivencia»
Falta de personal y exceso de trabajo en la oficina de la síndica
En cuanto al funcionamiento interno de su oficina, Zugazua ha comentado que actualmente son cuatro personas. Ha reconocido que «se necesita más personal. No llegamos a todo. La carga de trabajo es muy elevada»
A pesar de las limitaciones, ha destacado la dedicación del equipo. «Muchas personas vienen solo a ser escuchadas. Y aunque no podamos solucionar todo, que alguien les escuche con atención ya supone un alivio»
Una oficina que quiere seguir siendo útil y visible
La síndica ha explicado que su mandato termina en 2027 y que quiere dejar una oficina consolidada, moderna y eficaz. Ha indicado que muchas personas todavía no saben que existe la figura de la síndica y que pueden acudir a ella cuando sienten que el Ayuntamiento no responde
Para mejorar esa visibilidad, ha contado que están trabajando en nuevos materiales, guías claras y una mejor comunicación. «Hemos empezado a preguntar cómo nos conocen. Queremos saber qué canales funcionan y cómo podemos mejorar»