Este viernes, 26 de septiembre, se cumplen seis meses desde que comenzó la huelga indefinida del personal encargado del mantenimiento de los parques, jardines y el anillo verde de Vitoria-Gasteiz. Un servicio subcontratado por el Ayuntamiento y gestionado por la empresa Enviser, que ha visto cómo, tras medio año de parón, apenas se han producido avances significativos para resolver el conflicto.
Progresos limitados y salarios estancados
Durante este tiempo, la plantilla ha logrado mejorar aspectos como la jornada laboral y los permisos. Sin embargo, el escollo principal sigue siendo el económico. Según denuncian los trabajadores y los sindicatos ELA, ESK y LAB, la propuesta de Enviser “no cubre siquiera la recuperación del poder adquisitivo perdido durante la vigencia del último convenio estatal de jardinería”.
Calculan que la plantilla ha perdido más de un 13% de poder adquisitivo en los últimos años, lo que se traduce en cerca de 3.000 euros anuales por trabajador o trabajadora. Unas cifras especialmente graves si se tiene en cuenta que sus salarios ya eran bajos y que, en muchos casos, rondan el salario mínimo interprofesional.
Subidas “insuficientes” y responsabilidad compartida
La propuesta acordada entre Enviser y el Ayuntamiento contempla una subida salarial total de entre el 15% y el 20% en cuatro años, dependiendo de la categoría profesional. Pero los trabajadores insisten en que es una oferta “absolutamente insuficiente” que no permite cubrir sus necesidades básicas.
Además, denuncian que “la propuesta no garantiza de ninguna manera la recuperación del poder adquisitivo perdido”. La plantilla sigue decidida a mantener la huelga hasta lograr “unos salarios dignos, único elemento que desbloqueará el conflicto laboral”.
Desde la empresa insisten en que no pueden hacer más, y aseguran que es el Ayuntamiento quien impone el tope a las subidas salariales. También alegan que no disponen de margen económico adicional dentro del contrato vigente, que finaliza en 2027.
Acusaciones al Ayuntamiento y a Enviser
El comité de huelga acusa tanto a Enviser como al Ayuntamiento de no querer resolver el conflicto. Afirman que “la multinacional obtiene contratos con un beneficio industrial del 6% y pretende seguir enriqueciéndose a costa de la precariedad de la plantilla”. Al mismo tiempo, consideran que el Consistorio podría asumir la mejora salarial sin problemas, ya que representaría “menos del 0,1% del presupuesto municipal”.
Critican además la actitud del equipo de gobierno municipal, al que acusan de “buscar la rendición de la plantilla” en lugar de implicarse de verdad en la negociación. “Ha condicionado constantemente con sus decisiones políticas”, lamentan.
Reunión sin avances en el PRECO
En la última reunión mantenida en el PRECO el pasado jueves, la empresa volvió a mostrar una postura inflexible, según el comité. “Se negó a trasladar información importante para la parte social” y reiteró su intención de seguir imponiendo “injustas órdenes de servicios mínimos, que no tienen razón de ser”.
La representación sindical afirma que su “mano tendida” para encontrar una solución fue rechazada. “La empresa animó a acudir al juzgado para resolver las discrepancias”, relatan.
Movilización prevista para el viernes
Ante el estancamiento, la plantilla mantiene su calendario de movilizaciones. Si no hay un giro de última hora, este viernes celebrarán una manifestación a las 18:30 desde el Artium, coincidiendo con los seis meses exactos de huelga.
Con este acto, esperan volver a contar con “el gran apoyo social que sostiene una lucha justa contra las consecuencias de las nefastas políticas de privatización y subcontratación de servicios públicos del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz”.