Las comunidades de propietarios de Ariznabarra-Prado han encendido las alarmas ante la presencia repetida de instaladores de la empresa de telecomunicaciones DIGI en varios portales de la zona antigua del barrio. Según un comunicado distribuido estos días, la compañía estaría intentando colocar fibra óptica y otros elementos de infraestructura sin autorización explícita de las comunidades.
Los vecinos recuerdan que las fachadas son propiedad privada
El documento subraya que las fachadas “son propiedad en exclusiva de los propietarios y propietarias”. Por tanto, ninguna empresa puede intervenir en ellas sin el acuerdo formal de la comunidad. El texto insiste en que “en ningún caso, sin su autorización nadie puede usar sus fachadas para instalar infraestructuras”.
Además, el aviso rechaza la idea de que el Ayuntamiento tenga competencias para permitir estas actuaciones. “El ayuntamiento tampoco es propietario de las fachadas”, recoge el comunicado, remarcando que solo las comunidades pueden decidir sobre este tipo de instalaciones.
Llamamiento a organizar juntas vecinales
Ante esta situación, se recomienda que las comunidades convoquen Juntas de Propietarios para decidir si permiten o no la colocación de la fibra óptica u otras instalaciones de DIGI o de cualquier otra empresa. La intención es que cada comunidad pueda adoptar un acuerdo claro y dejar constancia en un acta.
El comunicado también apunta qué hacer en caso de que alguna empresa intente instalar infraestructura sin consentimiento. Entre las opciones propuestas están llamar a la Policía para que levante un atestado, recoger pruebas y presentar una denuncia en el juzgado solicitando, si procede, daños y perjuicios.
Aunque el aviso parte de Ariznabarra, la situación descrita refleja una tensión creciente en distintos puntos de Vitoria-Gasteiz. Las empresas compiten por desplegar sus redes en algunos barrios donde el cableado es antiguo o insuficiente, y en ocasiones recurren a prácticas que generan conflictos con las comunidades.




