El Ayuntamiento de Vitoria ha decidido intervenir en el conflicto de larga data entre la Comisión y la Federación de Blusas y Neskas, contratando a la Fundación Gizagune para una mediación de tres meses, con un coste de 18.000 €. Este conflicto, que se remonta al verano de 2015, ha dividido a las cuadrillas de blusas y neskas en dos colectivos distintos, alejándose del ambiente de unidad que prevalecía antes de las fiestas de La Blanca de 2015.
Reacciones mixtas ante la mediación
La Comisión, representada por su presidente Sergio González, ha manifestado su esperanza en «la unión de fuerzas» para superar lo que considera un «sinsentido» de división. Por otro lado, la Federación, que agrupa a las cuadrillas escindidas, argumenta que la coexistencia de ambas organizaciones es viable y ve la mediación no como un camino hacia la reunificación, sino como una oportunidad para mejorar la comunicación y abordar temas de interés común de manera más fluida.
Fundación Gizagune
La Fundación Gizagune, conocida por su experiencia en la gestión de conflictos y promoción de la convivencia, será la encargada de llevar a cabo este proceso de mediación. Su enfoque se centrará en tender puentes entre las partes para encontrar un terreno común que permita superar las diferencias.
Mientras que el Ayuntamiento y la Comisión contemplan la unificación como el objetivo final de este proceso, la Federación sostiene que es posible mantener la identidad y operaciones separadas de cada agrupación, reflejando una diversidad que, según ellos, enriquece las festividades de la ciudad al igual que en otras localidades.
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