A partir del 1 de julio, Aguas Municipales de Vitoria-Gasteiz S.A., comúnmente conocida como AMVISA, dejará de ofrecer atención presencial y telefónica debido a una huelga convocada por el sindicato ELA. Los trabajadores demandan estabilidad laboral, incremento de personal y jornadas completas. Esta huelga surge tras meses de denuncias del sindicato sobre el deterioro de las condiciones laborales desde el traslado de AMVISA a una nueva sede en agosto de 2023.
La plantilla de AMVISA que se encarga de la atención al ciudadano está externalizada y, desde su traslado al edificio ‘Gure Txokoa’, se ha reducido el número de empleados, quienes ahora enfrentan una mayor carga de trabajo sin mejoras salariales. Además, el uso de subcontratación y la falta de renovación del convenio colectivo desde 2011 agravan la situación. Desde ELA critican la falta de acción del Ayuntamiento para mejorar las condiciones laborales, mientras los directivos de la empresa han recibido aumentos salariales del 25%.
Reacciones del Ayuntamiento
Preguntado por esta situación, el Ayuntamiento ha declarado: «No vamos a hacer valoración. Es una contrata. Respetamos el derecho a huelga, lamentamos las afecciones que pueda tener en la ciudadanía y esperamos que puedan alcanzar un acuerdo cuanto antes».