El cierre de refugios climáticos durante los días más calurosos de este verano en Vitoria-Gasteiz ha generado polémica entre la ciudadanía y el grupo municipal Elkarrekin. En agosto, cuando la temperatura superó los 40 grados en algunos momentos, 15 de los 29 refugios climáticos permanecieron cerrados, y otros solo abrieron durante la mañana. Esta situación ha puesto en duda la eficacia del plan de calor, diseñado para proteger a los más vulnerables frente a las olas de calor.
Falta de refugios en los días más calurosos
Los refugios climáticos son espacios habilitados para que la población pueda resguardarse de las temperaturas extremas, tanto en interiores como en exteriores. En Vitoria-Gasteiz, esta red cuenta con 29 puntos, que incluyen centros cívicos, zonas verdes y edificios municipales. Sin embargo, según ha denunciado el concejal Óscar Fernández, de Elkarrekin, la mitad de estos refugios estaban cerrados en agosto, justo en los días que se registraron temperaturas superiores a los 34 grados, umbral que el Gobierno Vasco considera peligroso para la salud.
Además, algunas de las zonas más vulnerables, como el Casco Viejo o Coronación, se vieron especialmente afectadas, ya que los pocos refugios disponibles solo abrieron en horario de mañana.
El gobierno municipal admite problemas
El concejal de Medio Ambiente, Borja Rodríguez, ha reconocido que la red de refugios climáticos, puesta en marcha por primera vez en 2024, tiene margen de mejora. Según Rodríguez, aunque el plan de calor, que va del 1 de junio al 30 de septiembre, aún no ha concluido, el Ayuntamiento ya planea realizar una evaluación exhaustiva para mejorar el servicio de cara al próximo verano. Parte del problema, según ha explicado, se debió a las paradas técnicas de mantenimiento de los centros cívicos en agosto, mes en el que la población de la ciudad disminuye considerablemente.
A pesar de estas dificultades, Rodríguez subraya que es la primera vez que Vitoria cuenta con una red de este tipo y destaca que se seguirán ampliando los refugios y mejorando los itinerarios de acceso a ellos. También se tiene previsto realizar encuestas a los responsables de los edificios para obtener información sobre su funcionamiento y recoger sugerencias para el próximo verano.
Demandas de mejora y previsiones futuras
Elkarrekin ha insistido en que es fundamental que los refugios climáticos estén disponibles en los momentos de mayor necesidad. Fernández propone que se contrate personal adicional para asegurar la apertura de los centros en las horas de mayor calor y evitar que situaciones como la del 11 de agosto, cuando los termómetros marcaron cerca de 40 grados y la mayoría de refugios estaban cerrados, vuelvan a repetirse.
Por su parte, el Ayuntamiento ha afirmado que seguirá trabajando en la ampliación de la red de refugios, incluyendo más edificios de titularidad privada y mejorando la señalización de los refugios ya existentes. También se integrarán los mapas de los refugios y los itinerarios confortables en el sistema de información geográfica de la ciudad para facilitar el acceso de la ciudadanía.
El grupo Elkarrekin ha señalado que, aunque es positivo contar con una red de refugios climáticos, su gestión debe ser más efectiva. Fernández ha recordado que la salud de las personas está en juego y que los refugios deben estar operativos en las horas centrales del día, cuando las temperaturas alcanzan niveles peligrosos. A su vez, ha sugerido que el Ayuntamiento reevalúe el plan de calor para evitar que la mitad de los refugios se cierren justo cuando más se necesitan.
El gobierno local, por su parte, se ha comprometido a mejorar la gestión de la red y a implementar cambios basados en las sugerencias y denuncias recibidas este verano. Aunque se trata de la primera experiencia de este tipo en Vitoria-Gasteiz, todos coinciden en que hay aspectos que mejorar para garantizar la protección de la ciudadanía frente al cambio climático y sus efectos.