Starbucks Vitoria lleva funcionando más de un año en la calle Prado sin contar con la licencia municipal de actividad, y el propio Ayuntamiento ha calificado esta situación como una “auténtica tomadura de pelo”. La afirmación ha partido del concejal de Medio Ambiente, Borja Rodríguez, durante la última Comisión de Territorio celebrada este martes, en la que se ha abordado este caso a raíz de preguntas formuladas por Ekaitz Díaz de Garayo (EH Bildu) y Óscar Fernández (Elkarrekin).
La cafetería abrió sus puertas el 10 de octubre de 2024 sin haber presentado previamente la comunicación obligatoria para iniciar su actividad. Dos días después, el 12 de octubre, el Ayuntamiento dictó un decreto de suspensión por carecer de la autorización municipal necesaria. A pesar de ello, la empresa mantuvo abierto el local, por lo que el Consistorio abrió un expediente de disciplina urbanística por funcionamiento irregular.
Meses más tarde, el 11 de julio de 2025, Starbucks Vitoria presentó una solicitud de comunicación previa para regularizar su situación, pero el expediente sigue sin resolverse. En ese procedimiento se han detectado múltiples deficiencias: no se ha incluido el sistema de calefacción, faltan los planos del sistema de ventilación y climatización, no se justifica el tratamiento de residuos y no consta el cumplimiento de las condiciones acústicas ni los certificados de legalización de las instalaciones. A esto se suma que la documentación técnica requerida sigue incompleta.
Además de ese expediente, el concejal ha explicado que hay otros dos procedimientos más abiertos: uno desde el área de Medio Ambiente y otro desde Urbanismo. El Ayuntamiento ha requerido a la empresa que subsane las deficiencias, pero a día de hoy la cafetería continúa operando sin haber obtenido la licencia correspondiente. “Esto está siendo una auténtica tomadura de pelo”, ha afirmado Borja Rodríguez, que ha reconocido que no se puede poner en marcha una actividad como esta sin cumplir todos los requisitos legales.

Starbucks Vitoria
El local había funcionado previamente como cafetería, pero el cambio de titularidad y la nueva actividad implican un nuevo proceso de autorización que exige cumplir con toda la normativa vigente. El expediente continúa en tramitación y el Ayuntamiento no ha concretado cuándo se resolverá ni si se contemplan medidas cautelares como el cierre del establecimiento.
La situación ha sido planteada en la comisión por los grupos EH Bildu y Elkarrekin, que han preguntado por los motivos del retraso, la documentación pendiente y los criterios que se aplican en estos casos. El concejal ha insistido en que no se puede permitir que ninguna actividad se desarrolle sin licencia, y ha subrayado que el Ayuntamiento ha actuado conforme a los procedimientos previstos, aunque el caso sigue abierto más de un año después de la apertura del local.


Tantas cosas sin licencia como muchos locales de Diputación…