La crisis de vivienda en Euskadi no solo no remite, sino que sigue escalando. El último Deustobarómetro confirma lo que el Sociómetro Vasco ya adelantó en julio: la vivienda es la principal preocupación de la sociedad vasca por primera vez desde 2008. Pero ahora los datos van más allá: el nivel de alarma social ha alcanzado cotas que no se veían desde 2007, en plena burbuja inmobiliaria.
La mitad de la ciudadanía vasca señala el acceso a la vivienda como el problema número uno del país. Hace apenas año y medio, solo dos de cada diez lo mencionaban. La escalada ha sido vertiginosa. Y el veredicto sobre las políticas públicas, demoledor: un 3,8 sobre 10.
La cesta de la compra, segunda gran preocupación
Pero la vivienda no es el único frente abierto. La subida de precios de la cesta de la compra se ha convertido en la segunda preocupación más intensa de la ciudadanía vasca, mencionada por el 40% de los encuestados. El dato es significativo: la inflación en productos básicos ha adelantado a la sanidad, que durante años ocupó los primeros puestos del ranking.
Es decir, a los vascos les quita el sueño llegar a fin de mes: pagar el alquiler o la hipoteca, y llenar la nevera. Las dos grandes emergencias del bolsillo.
Y lo de «quitar el sueño» no es solo una expresión: el Deustobarómetro revela que la incertidumbre económica afecta literalmente al descanso. El 16% de las personas de clase baja afirma haber sufrido insomnio «muchas veces» en la última semana. Si sumamos los que lo padecen «bastantes veces», más del 40% de la clase trabajadora tiene problemas para dormir. En las clases altas, esa cifra baja al 9,6%.
La preocupación por Osakidetza, mientras tanto, continúa su tendencia descendente y se sitúa en el 33%. La valoración del sistema sanitario vasco sigue recuperándose progresivamente. Un dato curioso: el servicio público mejor valorado por la ciudadanía vasca no es la sanidad ni la educación, sino el transporte público, con un 6,6 sobre 10.
Jóvenes: más tristes, más ansiosos, más abstencionistas
Los datos de salud mental entre los más jóvenes son preocupantes. El 26% de los vascos de entre 18 y 24 años ha sentido tristeza «muchas veces» en la última semana, frente a apenas el 4% de los mayores de 65 años. En ansiedad, el patrón se repite: el 15% de los jóvenes la sufre con frecuencia, frente al 3,5% de sus mayores.
Y esa generación que peor lo está pasando emocionalmente es también la más desconectada de la política: el 39,5% de los jóvenes de 18-24 años afirma que no votaría si hubiera elecciones ahora, más del doble que la media general (17,3%).
Una generación que no escuchó los relatos sobre el franquismo
Pero quizá el dato más inquietante del Deustobarómetro no tiene que ver con la actualidad, sino con la historia. O, más bien, con cómo las nuevas generaciones la perciben.
Uno de cada cuatro jóvenes de la generación Z cree que Franco fue un gobernante que trajo bienestar social a la ciudadanía. Una proporción similar considera que el franquismo aportó estabilidad económica y desarrollo a Euskadi.
Son cifras que contrastan radicalmente con las generaciones anteriores. Entre los baby boomers y la generación X, quienes crecieron escuchando de sus padres y abuelos lo que supuso la dictadura, apenas uno de cada diez comparte esa visión.
«Aunque los jóvenes asuman que Franco fue un dictador, no lo ven exclusivamente como algo malo», advertía hace unos meses Gutmaro Gómez Bravo, catedrático de Historia de la Universidad Complutense y director del Grupo de Investigación de la Guerra Civil y el Franquismo. «A nivel familiar se rompe la cadena y no se cuenta, por miedo, por vergüenza o por mil cosas».
Los datos del Deustobarómetro confirman esa ruptura en la transmisión de la memoria histórica. Los jóvenes que hoy tienen entre 18 y 27 años no han recibido esos relatos con la misma intensidad, y el resultado es una imagen peligrosamente edulcorada del franquismo.
El Deustobarómetro es elaborado periódicamente por la Universidad de Deusto y constituye una de las principales herramientas de análisis de la opinión pública en Euskadi.
Puedes ver más sobre la encuesta de la edición de invierno de 2025 en deusto.es/barometrosocial

