El Instituto Foral de Bienestar Social y el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz mantendrán cerrados los centros de día de personas mayores y con discapacidad de forma temporal durante esta semana, con posibilidad de ampliación atendiendo las medidas de seguridad sanitaria decretadas por el Gobierno Vasco.
En el caso de la capital, se mantienen cerrados desde este pasado domingo los servicios de atención diurna de Beato Tomás de Zumárraga, Blas de Otero y Santa María de Olárizu. Este cierre temporal de los centros ha sido adoptado por indicación del departamento vasco de Salud, una vez vista la evolución de los datos de la Covid-19.
Ante este nuevo escenario, el departamento de Políticas Sociales, Personas Mayores e Infancia ha organizado un dispositivo de apoyo a domicilio a las personas usuarias de estos centros a las que prestará ayuda en momentos concretos del día como el del aseo personal o para la realización de ejercicios físicos y de estimulación cognitiva, apoyo durante la comida o para pasear. También ha habilitado un servicio de comida a domicilio para atender los casos de mayor vulnerabilidad, con una veintena de menús que se elaborarán en la cocina central del CIAM San Prudencio.
El Instituto Foral de Bienestar Social (IFBS) ha puesto en marcha desde hoy dos centros de día de referencia para personas mayores que darán servicio a los casos más urgentes, una vez que se han cerrado estos recursos como medida de precaución por el aumento de casos de Covid-19 en Euskadi.
El cierre de los centros de día forales para personas mayores es una medida de carácter temporal, que en principio se extenderá hasta finales de esta semana, con posibilidad de ampliación dependiendo de la evolución del coronavirus.
Así, se han activado diferentes medidas que permitan la atención de los caso con necesidades familiares o sociales urgentes. Una de ellas es la puesta en funcionamiento de dos centros de día de referencia, Zadorra y Bizia, que atenderán a 29 personas. Ambos centros solo ocuparán la mitad de su capacidad para garantizar las medidas de seguridad y extremarán las actuaciones relativas a la limpieza e higiene.
Asimismo, se ha puesto en marcha un servicio de comidas a domicilio para aquellas personas usuarias que lo necesiten. Otra de las medidas es la activación del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) de carácter urgente para quienes no utilizaban este servicio, así como la ampliación de horas de atención a quienes ya eran personas usuarias pero precisan de mayor intensidad de la ayuda.
Se han previsto estas mismas medidas de apoyo para las personas usuarias de centros de día de discapacidad, aunque tras contrastarlo con las familias no se ha visto necesario abrir ningún centro de referencia para atender posibles casos urgentes.