Inicio Noticias de Vitoria-Gasteiz

Larrion alega problemas mentales y hará trabajos comunitarios para evitar el banquillo

"Mi viaje de vuelta no ha acabado. Sigo en tratamiento"

0
Miren Larrion
Miren Larrion

Miren Larrion no se sentará en el banquillo tras haber llegado a un acuerdo con el Ministerio Fiscal con el que reconoce su autoría en el escándalo de suplantación de identidad a una excompañera de partido. El trato consiste en haber aceptado su responsabilidad en el caso que supuso su dimisión a cambio de realizar «trabajos para la comunidad».

La que fuera líder de la oposición en el Ayuntamiento de Vitoria ha publicado un comunicado donde señala que ha presentado diferentes informes donde se confirma que sufre problemas de salud mental. «Mi viaje de vuelta no ha acabado. Sigo en tratamiento. Además, y como os he dicho, he alcanzado un acuerdo y en breve espero poder estar haciendo trabajos comunitarios, y poder ayudar a otros, como otros me han ayudado a mí, y así poder cerrar ese episodio. Ha sido duro. Pero incluso de lo duro se puede sacar algo positivo. Muchas personas habéis sido ese algo positivo» ha señalado.

Fue el 22 de febrero del 2021 cuando EH Bildu Gasteiz lanzó una nota de prensa comunicando que aceptaba la dimisión de Miren Larrion. Fue en ese momento cuando todas las alarmas se encendieron, ya que se desconocía el motivo. Al día siguiente, salió a la luz que había sido cazada utilizando el DNI de una compañera de Diputación para abrir una cuenta bancaría en la que ya había hecho ingresos, son dinero personal. Ante esta situación, se abrió una investigación por un delito de suplantación de identidad. La asesora a la que suplantó Larrion intentó retirar la denuncia al enterarse de que era ella

Comunicado

Hace ya algo más de un año que públicamente reconocí un error. De lo que en ese momento yo no era consciente era que abrir una cuenta utilizando una documentación de una compañera además de ser un error, también, era un grito de ayuda.

Tuve suerte de que ese grito de ayuda fuera tan fuerte que fue escuchado. Y así, pude ser atendida, diagnosticada y tratada por el mejor de los equipos de Osakidetza.

En estos momentos también puedo deciros que he alcanzado un acuerdo sobre esta causa judicial, donde está el atenuante, en base a los informes de estos profesionales.

Os debo decir que yo entonces sabía que estaba mal, pero no era para nada consciente de cuánto. Había comentado más de una vez el cansancio que sentía o los problemas para dormir. Pero es cierto que en aquella época, esos eran problemas muy comunes, y que, además, tenemos esa costumbre de no dar importancia a lo que nos pasa.

Más de uno me ha dicho, “pero si tú eres fuerte”. Y creo que ese es otro mensaje que debemos analizar. Se puede ser fuerte, pero ¿qué pasa si estás sometida a mucha presión y angustia durante demasiado tiempo? Yo, al menos, me quebré.

Había ido progresivamente desconectándome de mí misma, de la persona que era. Me había roto por dentro.

Así empezaba el largo camino de vuelta. Lo primero y fundamental fue dejar atrás el ambiente de estrés y angustia, aislarme del daño. Iniciar el tratamiento. Y tener apoyos alrededor.

Voy a reconocer lo evidente. Hay gente, mucha, que te deja sola. Voy a reconocer lo evidente. Afortunadamente hay gente que sabiendo lo anterior, decide que no te vas a quedar sola.

En mi caso habéis sido muchas y muchos los que intuisteis que lo mío era un problema de salud mental. Sois bastantes las que de alguna manera habíais vivido algo parecido y podíais identificarlo. No puedo poner en palabras lo que ha supuesto cada uno de los gestos que habéis tenido.

Hablo de la familia cercana que se vuelca y de tu círculo de amistad más cercano. Pero hablo también de mis compañeros de trabajo de la UPV/EHU, de antiguos condiscípulos y compañeras de otras mil batallas que me enviaron mensajes, que me manifestaban su apoyo. Hablo de mensajes en redes sociales que aun no he he sido capaz de leer y que contestaré cuando vaya pudiendo. Hablo de vecinas y de personas que en la calle me paraban un momento con cariño.

Y en momentos donde los problemas de salud mental están tan extendidos, quiero enfatizar la importancia de cada gesto. La recuperación no es un acto, un momento, sino un montón de pequeños cambios. Y esos gestos ayudan a reforzarlos. Y así se convierten en hábitos, y si pueden mantenerse se convierten en lo que una es.

La fragilidad es vernos cada una de nosotras como un pequeño copo de nieve. Cada uno por nuestro lado somos muy frágiles. Pero en estos momentos somos muchos copos de nieve. Está nevando. Y el manto de la salud mental se va haciendo más visible, más urgente.

Mi viaje de vuelta no ha acabado. Sigo en tratamiento. Además, y como os he dicho, he alcanzado un acuerdo y en breve espero poder estar haciendo trabajos comunitarios, y poder ayudar a otros, como otros me han ayudado a mí, y así poder cerrar ese episodio. Ha sido duro. Pero incluso de lo duro se puede sacar algo positivo. Muchas personas habéis sido ese algo positivo.

Mi viaje de vuelta no ha acabado pero estoy más cerca de mi próximo destino. Hay muchos más viajeros. Cada pequeño gesto que hagamos harán esa vuelta un poco más fácil. Cada mensaje del que consigue llegar la hará otro poco más fácil. Hagamos ese camino al andar. Eskerrik asko!

SIN COMENTARIOS

TU COMENTARIO SE PUBLICARÁ UNA VEZ SEA APROBADO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Salir de la versión móvil