
Un trabajador de 53 años murió en un accidente laboral en una oficina de Kutxabank en Izarra, Álava, el lunes 9 de enero. Según el sindicato LAB, esta muerte es el primer accidente laboral mortal en Álava y se debe a las cargas de trabajo y presión cada vez más altas en el sistema neoliberal.
El sindicato también denuncia que en 2022 se han producido 23 muertes no traumáticas en Euskal Herria debido a problemas cardiovasculares causados por factores laborales. Kutxabank es criticado por el sindicato por crear nuevos riesgos y eliminar medidas de seguridad, y se exige al Gobierno Vasco que tome medidas inmediatas para combatir los accidentes laborales y las enfermedades profesionales.
El sindicato LAB denuncia que la privatización de Kutxabank ha aumentado el riesgo laboral y ha afectado negativamente a las condiciones laborales y la calidad de vida de sus trabajadores. Además, el cierre de oficinas y la reducción de plantilla ha aumentado las cargas y ritmos de trabajo, aumentando aún más los riesgos laborales. Para reducir costos, Kutxabank también suspendió medidas de seguridad, como la de tener al menos dos trabajadores en cada oficina, lo que pudo haber contribuido a la muerte del trabajador. El sindicato exige al Gobierno Vasco que tome medidas inmediatas para combatir los accidentes laborales y las enfermedades profesionales.
Es normal que pasen estas cosas si cada vez se presiona más y más a los trabajadores.
El mismo caso se está dando en empresas públicas como AMVISA. Para encubrir un recorte de personal en la depuradora de potables, han hecho triquiñuelas que rozan lo ilegal, hasta conseguir que durante las noches y fesfivos, el agua de Vitoria y gran parte de Álava dependa únicamente de una persona, aislada y trabajando en condiciones más que dudosas.
Todos sabemos que acabará en una subcontratación de servicios como en las aguas residuales. Algún amguete del PNV se beneficiará.
Mientras tanto, el comité de empresa de AMVISA y del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz mirando hacia otro lado, algo habrá sacado en todo este asunto? El tiempo dirá!
Luego nos lamentamos cuando pasan cosas como este trabajador de Izarra.