
Tras el incendio ocurrido la semana pasada en la planta de reciclaje de Artapadura, gestionada por la empresa Onaindia, el grupo municipal Elkarrekin ha puesto en duda que la instalación esté funcionando dentro de la legalidad. La formación cuestiona si se están realizando actividades sin la autorización municipal correspondiente y ha anunciado que llevará el asunto a la próxima comisión de Medio Ambiente.
Ante esta situación, fuentes del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno Vasco con las que ha podido hablar esta redacción confirman que la empresa no ha tramitado ninguna solicitud para ampliar su actividad como gestora de residuos no peligrosos. Sin embargo, no ofrecen información sobre si la planta está operando actualmente dentro de los márgenes que establece su licencia vigente.
Según explican desde Medio Ambiente, el 22 de enero de 2022 Onaindia trasladó su intención de ampliar su actividad. En una reunión presencial, se le informó de que cualquier ampliación de este tipo supondría una modificación sustancial y, por tanto, debía tramitarse como una Autorización Ambiental Única (AAU). A pesar de ese aviso, no se inició ningún procedimiento formal.
“Tienen una autorización sectorial vigente y válida para desarrollar la actividad que tienen autorizada. Para nuevas actividades que requieran modificación sustancial, se requiere una aprobación expresa del Gobierno Vasco, pero eso debe partir de una solicitud del gestor. En este caso, no ha habido solicitud nueva”, indican.
El 7 de febrero de 2025, la empresa realizó una nueva consulta, esta vez para conocer el procedimiento que debería seguir en caso de querer ampliar su actividad. De nuevo, no se presentó ninguna solicitud. “Siguen sin solicitar autorización para nueva ampliación, a la que no están obligados si no se ejecuta esa ampliación. Como es el caso”, subrayan.
Desde Medio Ambiente también recuerdan que Onaindia, por ser gestora de residuos no peligrosos, deberá obtener una Autorización Ambiental Única antes de diciembre de 2025, independientemente de que decida ampliar o no su actividad.
La respuesta, sin embargo, no aborda el asunto central planteado por Elkarrekin: si la empresa está cumpliendo con la licencia actualmente en vigor. Tampoco aclara si, tras la denegación de una solicitud de ampliación en 2023 por parte del Ayuntamiento, se ha llevado a cabo algún tipo de seguimiento o inspección para verificar si se están respetando las condiciones legales.
Elkarrekin sostiene que en 2021 ya se detectaron actividades fuera de licencia y recuerda que los informes técnicos municipales y del servicio de bomberos fueron claramente desfavorables. “Queremos saber si se ha seguido haciendo las actividades fuera de lo que marcaba la licencia municipal propia”, afirmó la portavoz del grupo.
Las fuentes consultadas insisten en que no ha habido modificación sustancial y, por tanto, no hay obligación de presentar una nueva solicitud. Pero no precisan si se ha comprobado que la actividad actual se ajusta a los términos autorizados ni si se han corregido las deficiencias señaladas en informes previos.