
El diputado general de Álava, Ramiro González, ha hecho un llamamiento a las organizaciones deportivas, entre ellas el Baskonia, para que actúen con responsabilidad ante la situación en Gaza. En su primera comparecencia del curso político, González ha sido rotundo al calificar la ofensiva israelí como “un genocidio” y ha expresado su preocupación por la inacción de la comunidad internacional y de la propia Unión Europea.
Al ser preguntado por la presencia de equipos israelíes en competiciones europeas como la Euroliga —en la que participa el Baskonia—, González ha dejado claro que la comparación con Ucrania es inevitable: “Lo que está ocurriendo en Gaza desde luego no es menos grave que lo que está ocurriendo en Ucrania. Creo que eso es evidente”.
Llamamiento a la Euroliga y a las entidades locales
Aunque ha recordado que la decisión de excluir equipos corresponde a organismos internacionales como la Euroliga o la Unión Ciclista Internacional, González ha insistido en que estos entes deben ser coherentes: “Creo que esas decisiones tienen que llevarles a concluir que lo que ocurre en Gaza no es menos grave que la agresión de Rusia a Ucrania. Eso creo que lo tenemos claro todos y todas”.
En ese sentido, ha reconocido que estas decisiones afectan directamente a clubes como el Baskonia, que están sujetos a las normas de dichas organizaciones: “Ponen en situaciones difíciles a veces a organizaciones locales o estatales, como ocurre con la organización de la Vuelta o como puede ocurrir con el Baskonia, que no pueden actuar al margen de las decisiones que toman esas organizaciones internacionales”.
Pese a ello, González ha lanzado un mensaje claro: “Creo que tienen que ser sensibles”.
Condena política y responsabilidad institucional
Durante su intervención, el diputado general ha reiterado en varias ocasiones que lo que ocurre en Gaza debe ser calificado como genocidio, y que no se trata de una expresión coloquial: “Estoy utilizándolo como la expresión de lo que técnicamente es un genocidio”.
También ha añadido que este tipo de violencia contra la población “debe interpelarnos a todos y todas” y ha subrayado que es responsabilidad de los representantes públicos “alzar la voz”. En ese sentido, ha hecho extensiva esta llamada a la sociedad y a las instituciones, incluyendo al ámbito deportivo: “La historia juzgará con absoluta dureza a los mandatarios internacionales que están siendo absolutamente incapaces —algunos porque no quieren, otros porque no pueden— de parar este genocidio”.
En ese contexto, ha pedido que la sensibilidad también llegue a las canchas, como un gesto de compromiso ante la gravedad de los hechos.