El laberinto vegetal de Olarizu, que se inaugurará este viernes, guarda una curiosidad que pocos esperaban. Cada invierno “desaparecerá” visualmente, ya que los setos que lo forman perderán sus hojas.
Durante la Comisión de Espacio Público celebrada hoy, el concejal de Elkarrekin, Óscar Fernández, ha preguntado por el estado actual del laberinto y por qué no muestra la frondosidad esperada antes de su inauguración. La concejala de Espacio Público, Beatriz Artolazabal, ha explicado que la imagen actual se debe a que se trata de árboles caducos y que en otoño pierden las hojas, un proceso natural.
Después de la sesión, desde su Departamento han aclarado a GasteizBerri que los setos son tipo carpe, una especie autóctona y caducifolia.

Esto significa que el laberinto cambiará de aspecto según la estación. En primavera y verano será un espacio verde y cerrado, pero en los meses fríos se volverá transparente, dejando ver por completo su interior.
El proyecto, financiado con fondos europeos Next Generation, se encuentra junto al Jardín Botánico de Olarizu y forma parte del Anillo Verde.


Seguro, seguro que nuestro consistorio no tenía otras prioridades donde gastar fondos Next Generation…🙄 En cuanto al «laberinto», propiamente dicho, más allá de panegíricos que pueden leerse en cierta prensa «pesebrera» (ustedes ya me entienden 😉) con rimbombantes citas a la cultura clásica, lo cierto es que quizás la ubicación no era la más adecuada (de hecho ha tenido que reducirse en extensión por la presión vecinal) y el resultado se ve entre enternecedor y cutre…😅 Un laberinto en el que, incluso en la recreación del proyecto, se sugiere que, puesto de pie, un adulto ve de lado a lado de la instalación. Y ya el estado a día de inauguración da un poco de pena. Bueno, lo mismo en un siglo más queda super chulo!