El pasado año, Irabazi y Podemos sacaron adelante una moción en la que se pedía que la Policía Local de Vitoria tuviera una formación concreta en materia de asistencia a víctimas de agresiones por orientación sexual e identidad de género. Una demanda que exigida por los movimientos LGTBI+ y que se veían reflejados en algunos informes municipales.
Pues bien, casi un año después los uniformados vitorianos no han tenido dicha formación ya que no se les ha obligado a hacer el curso, con lo que no salió adelante. A este cursillo solo se apuntó un agente cuando son necesarias entre 15 y 20 personas para poder realizarlo.
Desde Lumagorri consideran que la formación de la policía no puede ser voluntaria sino obligatoria. También dicen estar muy preocupados ante la falta de una actitud proactiva en la formación de los agentes de cara a los delitos de odio por orientación sexual e identidad de género.