
Los policías adscritos al servicio de patrulla en bicicleta patrullan desde esta semana las calles y zonas verdes de la ciudad. Con nuevas bicicletas, vigilan ya parques, jardines, zonas peatonales, complejos deportivos y carriles bici. Hasta finales de septiembre, y a golpe de pedal, velarán por la seguridad ciudadana y vial, desde el compromiso con la movilidad sostenible manifestado por la Policía Local.
La tarea diaria de los bicipolis se centrará en formar y educar en la correcta utilización de los espacios públicos, en fomentar el respeto en las relaciones entre los ciclistas y conductores de vehículos a motor y peatones y en prevenir la conducción negligente del resto de usuarios de la vía.
Además de informar, asesorar y controlar, denunciarán las infracciones que observen durante sus vigilancias. Del mismo modo, actuarán con aquellas bicicletas que carezcan de los elementos obligatorios o presenten deficiencias graves que puedan afectar a la seguridad de los ciclistas y del resto de conductores y peatones.
También colaborarán en las campañas de bicicletas y vehículos de movilidad personal que se desarrollarán en los meses de verano, dentro del Plan Estratégico Municipal de Seguridad Vial.
Doscientas intervenciones
En 2020, pese a las restricciones impuestas por la pandemia, los bicipolis alcanzaron las 206 intervenciones. Las más numerosas tuvieron que ver con incidencias e infracciones de tráfico (34) y la prevención y persecución de delitos (33). A continuación se situaron las relacionadas con infracciones a las ordenanzas municipales (19) y la intervención en pelas y riñas (13).