
La Policía Local desarrolla a lo largo de esta semana una nueva campaña del Plan Estratégico Municipal de Seguridad Vial 2018-2023, centrada en el control de bicicletas y vehículos de movilidad personal (VMP).
Durante estos días, los agentes vigilan que los ciclistas respeten las normas de circulación, así como los espacios y horarios donde está permitido su paso. También se controla el uso del casco en menores de 16 años, así como del timbre y de las luces obligatorias.
En el caso de los patinetes eléctricos, los agentes vigilan que no circulen por aceras ni zonas peatonales, que no viajen más de una persona y que sus conductores, como los ciclistas, no hagan uso de telefonía móvil ni de auriculares. Además, se comprueba que no superen la velocidad máxima permitida para este tipo de vehículos, es decir, 25 km/h.
Tanto los conductores de bicicletas como de patinetes están obligados a realizar las correspondientes pruebas de alcoholemia a requerimiento de los policías en caso de accidente, infracción o si muestran signos de conducir bajo la influencia del alcohol y/o drogas. En caso de negarse, podrían incurrir en una infracción administrativa muy grave que supondría una sanción de 1000 €.