El centro cívico de Judimendi, una de las instalaciones más utilizadas de Vitoria, cerrará sus puertas durante 15 meses debido a una reforma integral. La noticia, adelantada ayer por Gasteizberri, ha sido confirmada este mediodía en comisión municipal por la concejala de Centros Cívicos, Miren Fernández de Landa.
Las obras, con un presupuesto de 4,2 millones de euros financiados por el área de Urbanismo, tienen como objetivo mejorar la eficiencia energética, la accesibilidad y la seguridad del edificio. Sin embargo, el cierre afectará a los 365.000 usuarios anuales que acuden a sus instalaciones para realizar actividades deportivas, culturales y sociales.
Reformas necesarias, pero con impacto
El concejal de Urbanismo, Borja Rodríguez, ha detallado los trabajos que se llevarán a cabo. “El objetivo principal es reducir el consumo de energía primaria renovable en un 43%”, ha señalado. Para ello, se instalará una nueva fachada ventilada con aislamiento térmico, se sustituirán ventanas y se reforzará la cubierta del edificio. En el interior, se renovarán los sistemas de climatización y ventilación, se instalarán placas solares y se reorganizarán los aseos para mejorar la seguridad en caso de incendio. También se construirá una pasarela en la primera planta.
Según Fernández de Landa, el cierre del centro era la única opción viable: “La envergadura de la intervención hace imposible su uso normalizado y continuado durante la ejecución de los trabajos”.
Preocupación en el barrio
El anuncio ha generado malestar en el barrio de Judimendi, donde muchos vecinos critican la falta de alternativas. Desde la asociación vecinal Judimendikoak advierten de que “durante 15 meses, Judimendi y los barrios cercanos se quedarán sin un centro donde acudir”. Además, recuerdan que el barrio sigue sin contar con un Bizan adecuado para las personas mayores, lo que agrava la situación.
El cierre también afecta a los usuarios habituales del centro. Los monitores de actividades deportivas han comenzado a avisar a los alumnos de que el próximo curso tendrán que buscar otro centro cívico donde inscribirse.
Alternativas y reubicaciones
Para minimizar el impacto del cierre, el Ayuntamiento trasladará los servicios sociales de base al Centro Cívico Arana, donde se mantendrá la atención individual y familiar. Además, se reforzará la atención ciudadana con nuevos canales, como la vídeo-atención, prevista para septiembre.
Las actividades deportivas y culturales se intentarán reubicar en otros centros cívicos de la ciudad, priorizando los más cercanos como Arana y Salburua. Sin embargo, el Ayuntamiento reconoce que la disponibilidad de espacios es limitada y que habrá reajustes en la oferta.
El cierre también afectará al personal del centro. “Estamos trabajando en diferentes escenarios para minimizar el impacto en los trabajadores”, ha asegurado Fernández de Landa.
Reunión con los vecinos
Para informar a los afectados, el Ayuntamiento ha convocado un auzogune extraordinario esta tarde [viernes 28 de febrero] a las 18:00 en la sala de encuentro del centro cívico, donde responsables municipales explicarán las obras y responderán a las dudas de los vecinos. Además, se han programado reuniones con colectivos del barrio, como centros escolares y asociaciones.
“Sabemos que esta obra generará molestias, pero apelamos a la paciencia y comprensión de los vecinos porque el resultado será un centro más seguro, accesible y eficiente”, ha concluido la concejala.