
La concejala de Espacio Público y segunda teniente de alcaldesa, Beatriz Artolazabal, ha afirmado que la propuesta actual de Enviser “no es suficiente” para desbloquear el conflicto laboral que mantiene paralizado el servicio de jardinería en Vitoria desde hace más de 50 días.
“Hace falta una propuesta en condiciones, seria, que permita avanzar de verdad y empiece a desbloquear un conflicto que ya se prolonga demasiado”, ha declarado ante los medios.
Durante la última reunión con la dirección de la empresa, Artolazabal ha trasladado esta demanda. Según ha indicado, Enviser se ha comprometido a trabajar en una mejora de su oferta y a trasladarla al comité de empresa.
Artolazabal ha señalado que el Ayuntamiento ha exigido a Enviser que mantenga su participación en las negociaciones. “La situación ya se está haciendo complicada, más de 50 días de huelga, que perjudican a todos”, ha expresado.
El salario sigue siendo el principal punto de fricción
La concejala ha explicado que la plataforma sindical incluye once puntos, pero que el eje central sigue siendo el salario. “La solicitud que hacen los trabajadores todavía está lejos de lo que la empresa está proponiendo”, ha dicho.
Según ha expresado, considera que “no van a entrar a negociar el resto de las cuestiones si no hay un acercamiento en cuanto a los salarios”.
Limitaciones del contrato y decisión política
Artolazabal ha señalado que el contrato firmado con Enviser impide revisar precios hasta su finalización. “No podemos mejorar esos precios”, ha señalado, en referencia a la cláusula que lo establece.
También ha anunciado que no se contempla renovar el contrato vigente: “No vamos a prorrogar el contrato en estas condiciones, tal y como se está discutiendo lo relacionado con las condiciones laborales de los trabajadores”.
Artolazabal ha indicado que el equipo de gobierno continúa mediando en el conflicto. “Seguiremos exigiendo a la empresa que proponga alternativas que se acerquen a la propuesta de los trabajadores”, ha dicho.
También ha añadido que Enviser debe ajustar sus planteamientos a su capacidad económica: “La empresa tiene que tener en cuenta sus resultados empresariales y su capacidad de poder hacer ese esfuerzo”.
Ha concluido subrayando que, mientras el conflicto continúe, se mantendrá el esfuerzo de mediación: “Esperamos que, más pronto que tarde, finalice. Porque esto no beneficia a nadie.”