Desde que comenzó la crisis sanitaria del Covid-19 en Álava han fallecido 73 personas (133 en Euskadi), una situación que ha supuesto una subida pero que no ha saturado las funerarias de la capital alavesa. Según nos han indicado Alberto Zapatero y Nahia Lauzurica (gerentes de la funeraria Virgen Blanca y de Funeraria Lauzurica respectivamente) el nivel de trabajo ha aumentado pero no se ha llegado a duplicar, “Estamos trabajando a un ritmo normal (…) con total tranquilidad” nos indica zapatero.
¿Qué ocurre cuando fallece una persona por coronavirus?
Cuando una persona fallece en el hospital es el propio personal del centro quien mete el cuerpo en una bolsa estanca biodegradable cerrada con cinta americana para su posterior traslado a la funeraria donde se gestionará su cremación o su entierro. [Lauzurica señala que ahora han tenido que habilitar el servicio de recogida durante 24 horas en los hospitales, algo que solo hacían en los casos registrados en domicilios y residencias]. En ningún momento se vuelve a abrir la bolsa, nos indica Zapatero. Esta situación hace que las personas más allegadas al fallecido no puedan ver el cuerpo de la persona fallecida, “una situación que las familias entienden perfectamente” nos indican ambos gerentes. Cuando el fallecimiento se produce en un domicilio es la propia funeraria quien se encarga del cuerpo de la misma manera que en el hospital. Cualquier cosa que vaya con el fallecido, los anillos por ejemplo, se tienen que quitar antes de meterle en la bolsa estanca. Ya no se hacen velatorios, ahora directamente se entierran o se incineran.
No hay saturación
“Los niveles de trabajo han aumentado pero no se han duplicado” indican pero señalan que han tenido que reforzar la seguridad de sus empleados para evitar posibles contagios, “el personal de las funerarias está tomando medidas adicionales por seguridad” ya que “los protocolos de actuación están cambiando constantemente”.
Falta de material
Zapatero nos ha destacado que en ningún momento han tenido problemas por la falta de material, pero aún así ha reforzado todo el que necesitan (mascarillas por ejemplo) gracias a donaciones. En cambio, en Lauzurica se están quedando escasos y están a la espera de que les envíen más suministros.
Sorpresa
Nahia Lauzurica, quinta generación en la dirección de la funeraria homónima, también nos ha destacado que su empresa nunca ha vivido algo así, pero que están preparados para un posible pico de fallecimientos.
Especial Coronavirus
Es muy importante seguir las recomendaciones y sobrellevar la restricción de movimientos impuesta por el «estado de alarma».