
PRIMICIA – Brahim Gali, secretario general del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, lleva ingresado en el Hospital de Logroño más un mes rodeado de fuertes medidas de seguridad, según nos ha contado en el programa de radio de GasteizBerri Sonia Moreno, periodista de la Cadena SER en Marruecos y articulista en el diario elespañol.com.
Desde que salió a la luz que el presidente estaba en España, Marruecos ha llamado a filas al Gobierno de Sanchez creando la mayor crisis migratoria y diplomática recordada en los últimos años. Marruecos permitió cruzar a 8.000 personas a Ceuta, entre ellos varios fichados por el CNI por ser posibles terroristas yihadistas. Además, según se ha informado, para el paso de la frontera se fletaron autobuses desde Castillejos, Rincón y Tetuán (localidades vecinas a Ceuta pero en territorio marroquí) con jóvenes de entre 16 y 30 años.
El Sahara de trasfondo
La actual crisis diplomática tiene el Sahara de trasfondo ya que su presidente Brahim Gali lleva ingresado en un hospital de Logroño desde hace más de un mes por Covid-19. Según ha señalado Moreno, ha estado intubado y su estado de salud es «delicado», llegando a estar sedado y en coma inducido. Cabe destacar que Gali, a parte de tener el coronavirus, también está sufriendo un cáncer.
De Argel a Logroño tras ser rechazado en Alemania
El Covid-19 ha pegado muy fuerte en los campamentos de refugiados del Sahara, y según relata Sonia, Gali acudió a Argel pidiendo asistencia sanitaria, pero no lo admitieron, según parece, por no disponer de «suficiente capacidad sanitaria». Entonces, se comenzó a buscar un lugar de Europa donde tratarle.
El día antes de que él pidiera ayuda en Argelia, Marruecos ya sabía que Gali tenía Covid y que estaba buscando un lugar para tratarse en Europa. “Y por lo tanto, los servicios secretos estaban muy al tanto de esto, aunque ellos no pensaban que iba a acudir a España”.
El primer país al que se quiso viajar fue Alemania, que rechazó el ingreso. Entonces se saltaron Francia, porque en la actualidad está muy cercano de Marruecos tras la posición de Donald Trump a favor de Marruecos. Fue entonces cuando pidieron acudir a España. Según describe la periodista, las relaciones que tiene el embajador de España en Argelia “son muy buenas” con el Partido Socialista, porque «es Fernando Morán, el hijo del que fue ministro en la época de Felipe González y por lo tanto, socialista». Así que se puede deducir que fue Morán quien intercedió para que viniera a España apunta Moreno.
Cuando fue admitido en España, el primer destino iba a ser el Hospital Universitario del Principado de Asturias, porque es el hospital que da ayuda humanitaria a los saharauis de toda España, que están en España, o que vienen a España. “Por algún motivo no le habían admitido o habían decidido que no sería el mejor lugar” ya que en Asturias hay muchos saharauis y por lo tanto, también hay servicios secretos marroquíes. Con lo que sería más fácil descubrir que él estaba en el Hospital de Asturias. Moreno también destaca que el rechazo en Asturias podría estar debido, entre otras cosas, a que en el Gobierno del Principado manda el Partido Popular.
Logroño
Finalmente se eligió Logroño por varios motivos: gobierno del PSOE, una comunidad discreta y cercana a la base militar aérea de Zaragoza para su traslado.
¿Documentación falsa?
Otra de las cosas de las que se ha hablado mucho ha sido la de no registrar la estancia de Gali en el hospital con su nombre. Es decir, se registró con otro.
El gobierno español sigue insistiendo, a diferencia del marroquí, que él entró con un pasaporte diplomático argelino que, según Sonia, “tiene mucho sentido” porque ha sido el secretario general y fue muchos años embajador de de la República Árabe Saharaui Democrática en Argel y por lo tanto puede tener ese estatus de diplomático.
Se dice que entró con un pasaporte a su nombre y que después, lo que sigue, fue por discreción. «Él no solamente es un enemigo de Marruecos, hay otros servicios secretos como el de Israel que también le tiene ganas» concluye.