El futuro de los vuelos en el aeropuerto de Foronda está en el aire. El contrato para las rutas regulares sigue sin adjudicarse y el proceso se ha retrasado varias veces. La razón principal es la disputa entre Ryanair y AENA, que está afectando a varios aeropuertos en España.
El diputado general de Álava, Ramiro González, lo ha confirmado:
«Este nuevo concurso se ha topado con dificultades. La principal es el difícil momento entre Ryanair y AENA. Por eso hemos ampliado el plazo para que puedan presentarse más empresas y no solo Ryanair».
Inicialmente, las ofertas debían presentarse en enero, pero el plazo se ha ido retrasando hasta el 28 de marzo, justo cuando vence el contrato actual con Ryanair.
Debate en el Ayuntamiento
El tema también ha llegado al Ayuntamiento de Vitoria. La concejala de Promoción Económica, María Nanclares, ha asegurado que los vuelos seguirán operando a partir del 1 de abril, aunque el contrato aún no esté adjudicado.
Desde EH Bildu han denunciado que «Ryanair hace y deshace a su antojo». Señalan que la aerolínea está presionando a las instituciones, igual que ha hecho en otros aeropuertos como Valladolid, Jerez, Vigo y Zaragoza, donde ha reducido vuelos en su disputa con AENA.
En la comisión de Promoción Económica, EH Bildu preguntó directamente:
«¿Por qué se ha retrasado tanto este contrato? ¿Es otra exigencia de Ryanair, igual que la de acortar la duración del contrato?».
La respuesta oficial
María Nanclares ha explicado que el retraso busca que más compañías puedan presentarse:
«Las aerolíneas nos han dicho que necesitan más tiempo para solucionar su situación y poder participar en el concurso».
También ha negado que se esté favoreciendo a Ryanair:
«No es un chantaje. Queremos que cualquier compañía pueda presentarse y estamos buscando alternativas para que Foronda siga creciendo».
Dudas y preocupación
A pesar de las explicaciones, EH Bildu sigue viendo irregularidades. Han revelado que existe un informe jurídico que en octubre ya decía que el contrato debía cerrarse antes de enero por ser una «necesidad urgente».
«Decían que era urgente y aquí seguimos sin contrato. Ryanair presiona y las instituciones ceden», han denunciado.
